Derivado de la Reforma Labora de 2019, en la región del Bajío surgió un sindicato que ha manifestado ser independiente y de trabajadores, que pretende entrar a las distintas empresas de Guanajuato, pero ¿Realmente es independiente y de trabajadores?

Durante los últimos meses los trabajadores del Bajío se han dado cuenta de la intención que tiene SINTTIA para venderse como un sindicato independiente, pero que en realidad fue creado por autoridades norteamericanas que, amparados en el T-MEC encontraron la posibilidad de crear supervisores laborales extranjeros como el CILAS, que no solo verifica el cumplimiento de los acuerdos establecidos en el tratado internacional, sino que asesora y apoya a trabajadores en conflicto con las empresas para crear organizaciones sindicales.

El SINTTIA es uno de esos sindicatos, pues su propia secretaria general, Alejandra Morales, ha manifestado públicamente que el CILAS fue el organismo que abrió la puerta para que se creara el sindicato que hoy está presente en empresas como GM Silao y Frankische.

Aunado a ello, en reiteradas ocasiones los miembros del sindicato han demostrado que tienen como patrocinador a los EU. Incluso, los colores de la bandera norteamericana son los mismos que se utilizaron para crear la imagen institucional del SINTTIA, y no solo eso, sus principales líderes, constantemente realizan viajes al país vecino para apoyar la huelga de UAW, de lo cual no tienen mayor recato en publicar en sus redes sociales.

De dicho comportamiento surgen diversas interrogantes como ¿Quién solventa los gastos de traslado, hospedaje y alimentos? En el caso de Alejandra Morales, resulta lógico que dicho dinero proviene de las cuotas sindicales por el cargo que ostenta, aunque no se justifica la inversión de recursos para actividades sin beneficio para sus representados de GM Silao.

Sin embargo, en el caso del Director de la Casa Obrera del Bajío, ex trabajador de GM y parásito del SINTTIA, la inconformidad de los trabajadores de la planta sinaloense es cada vez mayor, pues sabedores de que sus cuotas sindicales sirven para pagar los gastos de Israel Cervantes, recriminan que este se pasee por el país del norte para perseguir sus propios intereses.

Y es que no hay que olvidar que los líderes de SINTTIA y la Casa Obrera del Bajío, crearon esta última organización como recompensa para Israel Cervantes, quien, al no conseguir su reinstalación en la planta de GM, fue beneficiado con un jugoso sueldo que sale de las cuotas sindicales que dan los trabajadores de GM Silao.

Esta situación que se ha venido develando desde hace ya varios meses, está llevando a que los agremiados del SINTTIA terminen de perder la confianza y busquen la desafiliación, manifestando que las promesas que llegan para convencer a los trabajadores son sólo mentiras, por lo que el rechazo de los trabajadores de distintas plantas que operan en la región del Bajío, es cada vez mayor.

Deja un comentario

Tendencias