• Los trabajadores señalan que, a pesar de las promesas hechas por Morales y su equipo, poco se ha avanzado en términos de mejoras salariales y condiciones laborales desde su llegada.
• Alejandra Morales Reynoso ha sido vista en diversas ocasiones en restaurantes y eventos sociales, lo que plantea dudas sobre su dedicación a las negociaciones y mejoras de las condiciones laborales.

La planta de General Motors en Silao se encuentra en medio de una creciente ola de descontento y desconfianza entre sus trabajadores, quienes expresan su inconformidad con el comité electo y los miembros de la comisión revisora del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) para el periodo 2024-2026. Desde la elección de Alejandra Morales Reynoso, como cabeza del Sindicato Independiente Nacional de Trabajadores y Trabajadoras de la Industria Automotriz (SINTTIA), las promesas de mejoras laborales y aumentos salariales parecen haberse estancado, según expresan algunos empleados de la planta.

Los trabajadores señalan que, a pesar de las promesas hechas por Morales y su equipo, poco se ha avanzado en términos de mejoras salariales y condiciones laborales desde su llegada. «Nos prometieron un cambio real, un aumento que realmente se reflejara en nuestros bolsillos, pero hasta ahora, todo sigue igual», comentó un empleado que pidió  mantenerse anónimo por temor a represalias.

Además, hay preocupaciones significativas sobre el compromiso de Alejandra Morales Reynoso con las necesidades de la fuerza laboral de GM Silao. Según reportes de trabajadores, Alejandra Morales Reynoso ha sido vista en diversas ocasiones en restaurantes y eventos sociales, lo que plantea dudas sobre su dedicación a las negociaciones y mejoras de las condiciones laborales. «Vemos a Alejandra en fotos y reuniones que no tienen nada que ver con nuestras demandas. Eso nos hace pensar que no tiene un interés real en luchar por nosotros», agrega otro trabajador.

La desilusión se extiende también hacia los integrantes de la comisión revisora del CCT, quienes son percibidos por algunos como poco efectivos en representar los intereses de los trabajadores ante la dirección de General Motors.

«Nos sentimos como si estuviéramos solos en esto. El comité y la comisión no parecen tener la fuerza o el deseo de presionar por los cambios que necesitamos», señalan

Este clima, surge en un momento crucial para la industria automotriz en México, particularmente en el contexto de los recientes esfuerzos por democratizar los sindicatos y mejorar las condiciones laborales en el sector. La situación en GM Silao pone de manifiesto los desafíos que enfrentan estos movimientos, así como la importancia de la transparencia, la comunicación y el compromiso genuino por parte de los líderes sindicales para ganarse la confianza de sus representados.

La comunidad de trabajadores de GM Silao espera acciones concretas que reflejen un verdadero interés por mejorar su situación laboral, más allá de las promesas electorales.